Psicologia Sanitaria

Auto·ESTIMA

La AUTOESTIMA es el conjunto de creencias, valoraciones y pensamientos que tenemos sobre nosotros mismos, y que hemos ido creando a partir de nuestras experiencias. Es la manera en que nos juzgamos y evaluamos, y nos da información de cómo nos sentimos con nosotros mismos. 

La autoestima tiene varias funciones psicológicas, aunque a veces provoque justo lo contrario:

  • Satisfacer tu necesidad de sentirte bien contigo mismo
  • Reducir el impacto de los rechazos que sufres en tu vida
  • Protegerte del miedo y la incerteza
  • Motivarte a luchar por tus metas

Todos podríamos ser más listos, más guapos y más ricos, pero se ha demostrado que la autoestima NO depende de lo que tienes, de lo que sabes o de lo que eres. ¡DEPENDE DE CÓMO TE ACEPTAS!

Tampoco se nace con baja u alta autoestima: evoluciona a medida que vivimos nuevas experiencias. Los eventos que tienen mayor influencia suelen ser aquellos que marcaron nuestra infancia, como la manera en que nos trataron nuestros padres, profesores o amigos. Por eso ciertas situaciones pueden causar un profundo impacto sobre tu autoestima:

  • Si ignoraban tus ideas en lugar de escucharlas
  • Si abusaban física o psicológicamente de ti en vez de respetarte
  • Si recibiste indiferencia y no afecto
  • Si te exigieron todavía más en lugar de reconocer tu esfuerzo
  • Si te culpabilizaron por tus fracasos en vez de aceptarlos

No estar a gusto siendo quien eres o no confiar en tus capacidades tiene unas consecuencias terribles. Probablemente dejes de atender encuentros sociales, probar cosas nuevas y enfrentarte a retos que darían riqueza a tu vida. 

Sabrás que sufres BAJA AUTOESTIMA si te suele ocurrir lo siguiente:

Recomendación

En lugar de buscar siempre el lado positivo, asume que tu mente está programada para presentártelo todo como una amenaza. Te sorprenderá menos. Ponte objetivos más pequeños pero alcanzables, y asume que fallar no significa el fin del mundo. Puedes volver a intentarlo las veces que quieras.

“El principal enemigo de nuestra autoestima es, sencillamente, no hacer nada”

Cuando nos sentimos amenazados nuestro instinto es buscar vías de escape porque creemos que así reduciremos nuestra ansiedad. Por eso cuando sientes miedo o desánimo en lugar de enfrentarte directamente a ellos intentas esquivarlos.

Y es lógico: en el momento en que decides evitar lo que te preocupa notas una sensación inmediata de alivio. El problema es que esa conducta puede terminar convirtiéndose en un hábito.

Porque, ¿cómo crees que terminarás sintiéndote a medio plazo? Evitar lo que temes y actuar como un cobarde no es algo de lo que puedas enorgullecerte, y eso vuelve a cerrar el maldito círculo de la baja autoestima. Por eso cuanto más evites lo que preocupa, peor te sentirás contigo mismo.

La autoestima no depende de lo que consigues, sino de lo que intentas. Solo enfrentándote a tus miedos lograrás romper este círculo vicioso.

1.    Sustituye tus objetivos por valores

¿Recuerdas que MARCARSE GRANDES OBJETIVOS suele ser sinónimo de frustraciones y pérdida de contacto con la realidad?

Vale pero entonces, ¿qué haces sin objetivos en tu vida? ¿Cómo vas a tomar decisiones? ¿Y cómo encontrarás la motivación para enfrentarte a tus retos?

Necesitas algo sólido. Algo que te permita seguir adelante cuando te sientas cansado, ansioso, deprimido o desanimado. Algo tan poderoso que te motive a salir de tu zona de confort para exponerte a aquello que temes.

Tengo lo que necesitas. Te voy a dar algo que posee todos los beneficios de los objetivos y ninguno de sus inconvenientes: 

¡Te vas a guiar por tus valores!

Los VALORES son nuestra definición más fundamental, nuestra hoja de ruta. Nos marcan la dirección cuando creemos que nos estamos perdiendo y nos dan energía para seguir luchando.

Imagínate que estuvieras entrenando para terminar una maratón. Tus valores probablemente serían el esfuerzo, la perseverancia, la superación personal y la capacidad de sacrificio, ¿verdad?

Piénsalo bien. Aunque finalmente no fueras capaz de terminar la maratón, esforzándote y sacrificándote lograrías igualmente permanecer fiel a tus valores. A diferencia de los objetivos,tus valores siempre van a estar ahí para que los cumplas y te sientas orgulloso/a de ti.

Gracias a tus valores también podrás conseguir un plus de autoestima cuando más lo necesites. ¿Recuerdas que las autoafirmaciones positivas no funcionan cuando son falsas? 

¿Qué ocurriría si en su lugar recordaras tus valores?

En un estudio de la Universidad de California los participantes tuvieron que improvisar un discurso delante de un jurado implacable. Y no solo eso, sino que al terminar se les ordenó que empezaran una cuenta atrás desde el número 2083 ¡en intervalos de 13! Sin duda, una situación capaz de poner a prueba la autoestima de cualquier persona.

Al finalizar el estudio se comprobó el nivel de cortisol, una hormona que aumenta en situaciones de ansiedad, en la saliva de los participantes. Pero había un pequeño detalle: antes de los discursos un grupo de ellos había escrito una reflexión sobre uno de sus valores personales.

Los resultados no dejaron lugar a dudas. Los voluntarios que escribieron sobre el significado de sus valores personales presentaron niveles de cortisol significativamente más bajos que el resto de participantes. La presión les afectó mucho menos.

¿TE GUSTA LO QUE LEES? QUIERES NUESTRO DOSSIER?